hernan1951

 
Afiliado: 20/04/2013
ya quisieran algunas manos acariciar como lo hacen tus palabras....!
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Último juego

La Copa

El silencio era de sus labios,
las palabras, mudas ellas,
quedaban en el corazón,
ahí, en el fondo de la copa roja que un día entregó en manos que no supieron asirla,
resquebrajando el cristal de sus ilusiones,
guardó con cuidado el tesoro,
esperando el momento oportuno de brindar nuevamente en él,
Con el tiempo transcurrido ya,
las grietas se habían fundido al calor de los amores,
sellando la fisura por donde discurría la pena del alma.
Para que  saborear el primer trago de la copa escondida ?
si no podré beber el fondo de ella,se preguntaba,
apartó la sed de su mente,
guardó nuevamente aquél cristal en lo más profundo de su corazón,
allí donde solo ella podía encontrarlo
y bebió del agua pura de una nueva vida,
pero con sabor a recuerdos.
HCC/JUNIO/2016


La entrega

La tibiesa de su cuerpo abrigaba la fría noche de invierno.
Desnudó su  día con la seguridad que se le prestaba la debida atención.
Sean pesares o alegrías, compartía la jornada sin prisa ni apuro alguno.
La tibiesa de sus vidas lograron con la cercanía encender el fuego apasionado.
Entrelazados los deseos unieron  fantasías en la realidad de sus vidas.
Caricias, pasiones y besos llevaron al orgasmo mutuo refrendado con la mirada tierna en el encuentro buscado de sus ojos inquietos.
Se amaban en silencio,se hablaban con caricias, se entendían en la entrega.
Reposaron el húmedo deseo satisfecho en el regazo de sus corazones.
HCC/Junio/2016


Hola realidad, adiós fantasía..!

Se miraron

Paralizados sus corazones
inmóviles sus pasiones
todo aquello que imaginaron sería,
desapareció.

Los envolvió un silencio
que cubrió su presencia
alejándolos de todo
acercándolos a la nada.

Solo estaban ellos
uno frente al otro,
paulatinamente las miradas se encontraron
las sonrisas hablaron más que mil palabras,
se extendieron las manos casi simultáneamente,
un brillo en sus ojos acercó sus cuerpos
fundiéndolos en uno.
un abrazo, extenso, interminable, dulce,
acompañó el temblor de sus cuerpos
en interminable y añorado tiempo.

Latían los corazones al compás de la emoción

Corría la sangre al ritmo de su desconcierto.
Era verdad?
Luego de tanto esperar,
Por fin llegó el momento?
Atrás quedaron las fantasías,
Era ahora una realidad,

El miedo asomó momentáneamente

Como queriendo romper el encanto.

 

Al sentir el aroma de su real presencia,

El miedo se  alejó derrotado.Era una realidad,
Atrás quedaron las fantasías.

Las risas,
entre nerviosas y agradecidas

Entonaron el encanto del momento
Se miraron nuevamente,
unieron sus labios por ves primera
Sellando por siempre la puerta de la distancia.

 Caminaron  tomados de la mano,
tal como lo habían imaginado tantas veces.

No era necesario pronunciar palabra alguna
los sentimientos hablaban,
pronunciaban en su silencio
la alegría inconmensurable del encuentro 

La húmeda y fría noche
retiró su penumbra
dando paso a la claridad nocturna
de la radiante Luna
que acompañaba sus pasos.

 

Aquellas estrellas de las que tanto hablaron
soñaron, imaginaron, vieron,
en sus noches distantes,

Derrochaban brillo,
alborotando el cielo
Alborotando sus corazones.

 Estaban juntos,
Llegó el momento anhelado.

Las pasiones desbordantes
De las conversaciones íntimas,
Dieron paso a la calma del amor
no se apresuraban,
Tenían todo el tiempo del mundo,
Su tiempo.

 El tiempo no tenía límites
eran dueños de él.

Una vez más se detuvieron,

Ahora sí,
las miradas ansiosas,
mencionaron sus sentimientos,
sus deseos,
sus pasiones,
sus esperanzas, anhelos y fantasías.

Podrían vivirlas,
podrían sentirse
podrían amarse
entregarse con aquella dulzura

expresada ayer con palabras,
Y hoy hecha realidad.

HCC/ Mayo 2016


Horas

Llegó a conocer la existencia del tiempo
Por la ausencia de su voz
Por el silencio de sus palabras
Por la lejanía de su presencia.

HCC/Mayo 2106


El Observador

Ella dormía,
él la observaba,
era tan bella,
solo el silencio podía expresar el sentimiento,
cualquier palabra rompería el encanto,
no era solo la belleza externa,
ni su cuerpo
ni sus manos
ni su rostro
ni su cabello,
era esa belleza que sumaba el ser con el espíritu,
pero...
estaba atado,
las ligaduras de la distancia,
impedían abrazarla,
tomarla en sus brazos 
sentir el calor de su vida,
solo observarla era su destino
aún desde la distancia
ella llenaba la copa vacía
y saciar la sed de amarla....
amarla por su encanto,
por su alma,
por su ser,
ese ser que en algún momento se entregó sin miedo ni temores.
HCC/Mayo 2016